Editorial

Grandes Titulares periodísticos han acaparado la atención de los mexicanos: La elección interna del PRD, el tráfico de influencias del actual Secretario de Gobernación Juan Camilo Mouriño, la de los jóvenes mexicanos muertos y una con vida, encontrados en un campamento de las FARC en Ecuador y el enfrentamiento constante entre la Policía Federal Preventiva, El Ejercito Mexicano, La Policía Estatal o Municipal contra los Narcotraficantes.En el caso de las elecciones internas del PRD, hasta ahora no se conoce el resultado de ese proceso electoral y han surgido muchas especulaciones expectativas y desencantos.Las especulaciones dieron como resultado que la ciudadanía se formara el criterio de que los vicios siguen prevaleciendo en el seno de las organizaciones y grupos de las instituciones políticas que actualmente carecen de una ideología que las distinga para saber si son de izquierda, de centro o de derecha. Actualmente la hibridación ideológica es notoria. La ética, la moral y la lealtad partidaria están ausentes, lo mismo que el conocimiento y oficio político, en tal razón, mucho menos les preocupan los intereses de la patria, lo que les lleva solo a tener privilegios y llevar en mente un objetivo: el enriquecimiento y obtener el poder. La defensa del petróleo, para que la paraestatal denominada Petróleos Mexicanos, no se privatice trajo como consecuencia inmediata, de que los funcionarios de esa empresa y algún miembro del poder legislativo acuerden beneficiarse familiarmente sin demérito de su carrera política como es el caso del actual Secretario de Gobernación Juan Camilo Mouriño, que inclusive se duda de que sea legal su designación para integrarse al gabinete de Felipe Calderón Hinojosa. Hechos que hacen que los mexicanos piensen que todavía no termina la Guerra de Independencia pues somos gobernados por hombres blancos y barbados. La especulación parte de las noticias últimas de que cuatro jóvenes mexicanos fueron sorprendidos en un campamento de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas), donde resultaron 3 muertos y una gravemente herida.Este hecho crea dos interrogantes en los mexicanos: ¿Qué hacían los jóvenes estudiantes en un campamento guerrillero? ¿Si pertenecían o no a las FARC?En la primer interrogante se puede suponer que estos jóvenes mexicanos ya no están de acuerdo con el sistema político de nuestro país, por las desigualdades económicas y la injusticia social que vive la mayor parte de la población. La otra interrogante es el supuesto de que efectivamente las guerrillas existen y para ello hay que prepararse y combatir para que haya una democracia real y acceder a mejores niveles de vida. En el caso del narcotráfico, el Estado tuvo que emplear a fondo sus Instituciones, preponderantemente al Ejercito, Policía Federal y Procuraduría General de la República. Lo sorprendente es que en muchos de los casos están inmiscuidos: policías estatales, federales, judiciales, políticos y funcionarios corruptos. Esta lucha contra el crimen organizado ha tenido como consecuencia miles de muertes.La situación actual que vive México es preocupante porque a medida que pasa el tiempo los problemas sociales, políticos y económicos se agudizan, la pobreza crece, la ignorancia se profundiza y el descontento popular es mayor. Al pueblo le pueden negar todo menos su libertad y comida. El petróleo mexicano solo ha servido para enriquecer a unos cuantos y el sistema político también. El pueblo solo ha recibido promesas y engaños. La vida miserable que lleva lo va conducir a la rebelión tarde o temprano. Es el origen de las revoluciones.