domingo, 19 de octubre de 2008

La caldera del diablo

Por. Diógenes de la Llave

El Diablo Cojuelo recordó un hecho anecdótico: En los primeros años de la presidencia del general Porfirio Díaz, los toluqueños sufrían una ola de desmanes. No había día sin crimen o salto o la diligencia y aún dentro de las cosas había que protegerse para evitar la entrada de los amantes de lo ajeno.

Un grupo de personas se dirigió a la ciudad de México para solicitar al presidente Porfirio Díaz a que tomara las medidas necesarias, Don Porfirio Díaz ordenó a un coronel oaxaqueño - compadre suyo – que se trasladara a Toluca y se hiciera cargo de la situación, dándole amplios poderes.

El coronel mandó imprimir unos avisas en los que se hacía saber que se castigaría con la pena de muerte a todos los que inflingieran la ley cometiendo delitos contra las personas: asesinatos, asaltos, robos, secuestros…, los infractores serían ejecutados en el mismo lugar del delito.

Después ordenó que los presidentes municipales los colocarán en lugares estratégicos y los leyeran en público para que todos quedaran enterados aún cuando no supieran leer.
Al día siguiente fue a la “Casa Henkel” dueña de la “Compañía de Luz y Fuerza” y pidió prestadas varias talegas de pesos.

Los soldados las fueron vaciando por la Plaza Central, los portales y calles solitarias. Cuando el trabajo estuvo concluido se fue a desayunar al Hotel San Carlos. Poco después un soldado le aviso; “mi coronel un joven se apodera de varias piezas de plata le hemos sorprendido con las bolsas llenas”

El coronel le acompaño hasta donde estaba el detenido y le preguntó ¿Dónde las has robado?

El terror le amenazaba, la garganta seca le impedía contestar.

¡Contesta! Le apremió. Pero el muchacho seguía sin contestar.

¡Siéntate contra la pared ¡ le urgió el coronel.

La gente se arremolinaba alrededor para ver lo que iba a pasar.

Ahora devuelve todo lo que has robado.
Le ordenó con voz tranquila el coronel

El muchacho se vació las bolsas. Sin más palabras, el coronel sacó la pistola y le disparo a la cabeza. Los sesos volaron y el cuerpo quedó allí hasta que el olor se hizo inaguantable.
Después de varias semanas, los soldados empezaron a recoger los pesos. No faltó ni uno.

Fue un cruel, es cierto, pero también fue el único escarmiento en mucho tiempo.

Tal vez en aquel hecho pagó las consecuencias un ingenuo o un individuo con necesidades extremas que se atrevió a exponer su vida a cambio de cubrir sus necesidades más elementales.

Cada una de estas acciones tiene sus interrogantes. Aunque coincidentes son muy diferentes, hay muchos hechos coincidentes con lo actual, prevalece la anarquía y desorden social, político, religioso y económico que obliga a que la sociedad civil tenga que organizarse para combatir la corrupción gubernamental, la injusticia – social, jurídica, económica – la ausencia democrática, el enriquecimiento ilícito de funcionarios y líderes corporativos. Es cierto que los fenómenos sociales no son repetibles en su forma pero sí predecibles en el tiempo porque son cíclicos: Movimiento de Independencia de México 1810, La revolución Mexicana en 1910, y el próximo 2010 que sorpresa nos traerá.

¿Un gobierno no representativo y debilitado por la ineficiencia de sus acciones será capaz de aplicar medidas para terminar con la desigualdad social, que provoca que exista la delincuencia organizada, la pobreza extrema, y el narcotráfico?


¿En verdad será guerra de narcotraficantes, crimen organizado o una guerra sucia entre políticos?






















UNO VISTE AL MONO
PARA QUE OTRO LO BAILE

Tres muestres, dos heridos de bala, más trescientos detenidos, dos sentenciados por homicidio que estuvieron privados de su libertad por más de quince años fue el costo de la lucha social del pueblo de San Gregorio en enero de 1964 para que se restituyera el terreno de San Juan Moyotepec, donde hoy se encuentra la Secundaria Nº 31, la Escuela Primaria “Independencia”, la Lechería Liconsa, la Unidad de Salud, la Secundaria para Trabajadores y la Compañía de Luz.

Unos pagaron los platos rotos y al cabo de algunos años otros vivales se aprovecharon. Desde la época en que el coordinador – entonces llamado subdelegado – Rogelio Guevara Venancio, se convirtió el SECOI en una fuente de ingresos extra para el funcionario local de San Gregorio al colocar a su esposa de responsable de ese centro para cobrar cuotas como si cobrara la renta del local. Con el paso del tiempo muchas personas se han ocupado en “sacarle tinta” a ese mueble.

Actualmente es el CECOI de San Gregorio Atlapulco quien regentea. Ninguno interino en la lucha, pero si e el reparto del pastel. Los vecinos del pueblo se preguntan ¿Dónde queda el dinero que se cobra a los usuarios? ¿Si la Directora General de Desarrollo Social Araceli Mundo, conoce de estas irregularidades? Es tiempo de que aplique la ley y finque responsabilidades a quien corresponda.

También se preguntan ¿Quién es el encargado de cobrar la renta a la Compañía de Luz y Liconsa?


EL QUE REPARTE Y COMPARTE
SE QUEDA CON LA MAYOR PARTE

Los funcionarios de CORENA y DESARROLLO RURAL desde hace mucho tiempo están en el ojo del huracán. A os de CORENA los cuestionaron de que los recursos económicos que manejan como apoyo, no cumplen con el objetivo para lo que fue creada la institución ya que desde la imagen misma donde están instaladas las oficinas es lamentable. Anteriormente se conservaba el área verde con trabajadores eventuales que hoy ya no existen, en cambio la estructura administrativa es abundante y por lo tanto onerosa.

Por igual resulta muy criticadas la Secretaria de Desarrollo Rural del D. F., el director Regional Nº 4 Ignacio Ruiz y la subdirectora Yolanda Torres Tello de utilizar recursos económicos para proyectos a una persona del grupo político al que ella pertenece que es Izquierda Democrática Nacional que dirige Rene Bejarano y que por tal motivo la organización UNTA – Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas – se inconformó con el bloqueo de la vialidad primaria Tulyehualco – Xochimilco, además de solicitar la renuncia de Yolanda Torres Tello y que por la presión ejercida los miembros de la UNTA se vieron favorecidos en sus demandas.


NADIE SABE PARA QUIEN TRABAJA

Muchos, pero muchos años han pasado; tantos que ya nadie o muy pocos recuerdan al Cine Xochimilco y el lugar donde se encontraba.

El dueño legítimo don Daniel Almazán, originario de San Salvador Cuauhtenco, no tuvo herederos directos en primera línea; motivo por el cual sus bienes quedaron intestados, lo que aprovecharon muchos vividores apropiarse ilegítimamente de su riqueza y bienes. Así se fueron apropiando del edificio del “Hotel reforma” que ahora ocupa la Zapatería Ribera que se encuentra en la calle de 16 de septiembre esquina con Madero.

En ese edificio se encuentra también un espacio destinado al “Patronato del centro Histórico” que hasta la fecha no tiene ninguna utilidad.

Durante el gobierno Delegacional de Juan Gil Elizondo, el edificio donde se encontraba el Cine Xochimilco fue habilitado para reubicar a los comerciantes ambulantes y posteriormente se instaló una “Tienda CONASUPO”.

Con el paso del tiempo, como dijo el “Monje Loco” “Nadie sabe, Nadie supo” si el edificio fue expropiado, comprado, permutado o vendido sin saber por quien, por un heredero “balín” o por alguna autoridad corrupta, ya que ahora se encuentra allí la Lega Tienda “Elektra” con venta de automóviles. Otra de las propiedades de don Daniel Almazán es la conocida como a Casa Azul, que se encuentra en la Avenida Nuevo León casí esquina con 5 de Mayo

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